Buenaventura gitana

Borré las lineas de mis manos,

esparto y rascadera,

piedra pómez,

incrusté un cepillo afilado,

rasqué,

rasqué,

pulí,

rancias durezas,

callos encebollados,

rugosidades dolientes,

inquietantes veredas

de longitud diferente,

en mí

no convergente…

Marmóreas manos inertes,

disipado tacto

de suaves caricias,

seda de rosa

transmutada en sangre coagulada,

lacia, pulimentada,

piel ahuyentando a piel,

sacrificio de un abrazo

ahora solo retazo

de un recuerdo inanimado…

pesada piedra fría,

esculpida flor de mi desierto,

ya no siento,

ya no siento…

No sabrás negra gitana,

aranera, infame,

mi mas sagrado futuro,

no leerás lo incierto,

de natura tan abierto,

no tenderás trampas

a un presente esperanzado,

ni confinarás futuros

a muros determinados.

Sacrifico mis manos,

mi alma se libera

de un porvenir

tal vez aciago.

Checha, 17 de septiembre de 2020