jueves, 4 de octubre de 2018


Indiferencia


Soñé que verte reír
sonora e inútilmente,
me era indiferente,

que tu llanto de cebollas
nacidas en tus areolas,
me era indiferente,

que tus gritos y tu saña,
punzadas en mis entrañas,
me eran indiferentes,

que tu rebeldía de niño
y tus cantos al rey sol,
me eran indiferentes,

que tu cansancio cansino
y tus caricias de espino
me eran indiferentes,

que tus aranas constantes
de vendedor ambulante,
me eran indiferentes.

Soñé al fin
que incluso la indiferencia
me era indiferente.
Al llorar, me desperté.

Checha, 4 de octubre de 2018


No hay comentarios:

Publicar un comentario