sábado, 2 de febrero de 2013

ELEGÍA DE CORAZONES. IN MEMORIAM. MILAMAMI.


ELEGÍA DE CORAZONES



¿QUÉ ES ARTE?, AQUÍ LO TENÉIS,
EL LLANTO DEL CHELO,
EL TINTINEO DEL PIANO,
LOS CUERPOS EN MOVIMIENTO,
TODO ENTRELAZADO,
DA COMO RESULTADO 
ESTA PUESTA EN ESCENA 
DE UNA MARAVILLOSA PLASTICIDAD.
LOS "PASO A DOS" EN LA DANZA ME EMBELESAN.

Elegie der Herzen


Milamami, 2 de febrero de 2013

Sí, Milamami, la vida es arte, ARTE DE BUEN VIVIR, ARTE DE BUEN MORIR.
El arte es la eternidad de la vida en el recuerdo, que une corazones para siempre.


Saber cómo vivir sin desfallecer es arte, y fallecer sin desfallecer, es vivir en el bello recuerdo de los otros, conseguir que la elegía, el llanto y el desamparo de la separación,  se transformen en alegría, en memoria viva para siempre.


   Hay muchas visiones de la muerte, tantas como concepciones del mundo; igualadora social, fin de todo, comienzo de la vida eterna….
Pero a fin de cuentas, comienzo y fin están inseparablemente unidos en el círculo o ciclo de la vida.


Necesariamente doloroso el fin, necesariamente doloroso el comienzo, ligados para siempre en la conciencia, en el recuerdo.
Saber esto es, “en el buen sentido de la palabra, bueno”.
Saber decirle a un enfermo grave: “¡oye, si te parece pondré en tu lápida: - “Perdonen que no me levante, pero no estoy de buen ver”!”, eso es reírse de la vida y de la muerte, eso es lo que tú sabes hacer.

     Checha, 2 de febrero de 2013

3 comentarios:

  1. ¡¡¡MUCHÍSIMAS GRACIAS MELONCITA!!! Es realmente bonito todo esto que has escrito, y sí tengo la certeza de que existe otra vida después, así como mi madre tiene la fe en su religión y eso le ayuda, y me parece muy bien, tengo en común con ella la creencia de que el alma o espíritu pasa a otro plano, que hay más después.
    Como te dije, me gustaría que muriera en mis brazos, para que se sintiera a gusto y acompañada en esos momentos, pero es algo que no se puede calcular ni predecir.
    Quizá venga mi abuela a recogerla y pueda verla otra vez, a ella la vi después de fallecida, y me importa un carajo que no me crean o que piensen que me falta un tornillo, me paso por el...... lo que piensen de mí los demás.
    Lo del epitafio en la lápida, surgió porque ella me dijo: "La pellejos", yo le respondí: "no tienes sólo pellejos", ella me contestó: "vaya que no, la pellejos y la medio muerta", y se reía, nos reímos con ganas, como veis tiene su buen humor, y entonces le dije, que si me dejaba le escribía en su lápida: "Aquí yace, dicho por ella misma, La Pellejos y Medio Muerta, y disculpen que no me levante y salga a saludarles, pues no estoy de buen ver". Nos seguimos riendo al recordarlo.

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  2. Es cuando menos curioso hablar de la muerte de alguien,en presente, de alguien que todavía está vivo. Las palabras de Checha son una por una, sinónimos de "amor". Se respira cariño al leerlas. Me alegro por ti, Mila, tienes una gran compañera en este viaje.
    He pasado por ahí, se pasa mal, y quien te diga que "se pasa con el tiempo" miente. El tiempo baja el volumen pero siempre queda ahí el hueco "material" y "del alma"...
    A las dos un abrazo grande. A tu madre, un ¡"chapó"!.

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  3. Creo que la vida está transida de muerte. Mueren recuerdos, amarguras, pesares, alegrías, personas, animales,....dando paso a re-naceres, y esto es necesario, es lo que hay, y no asumirlo puede significar la propia muerte en vida. Esto es lo peor. A los vivos muertos, nadie los recuerda, sus actos vitales generan muerte, incluso de la memoria.

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