Trago

Trago tristeza y soledad,

untados,

sin mantequilla,

a tragaperro,

como se traga un medicamento

áspero y amargo,

soñando en el letargo,

fin de un intenso dolor

que raya en el hartazgo

arduo

de espinas de flores

sin corola,

de estelas de luna nueva

sombrías,

de lirios de agua

en secarra plena.

Trago príncipes

que son sapos,

estrellas que se apagan,

heces de reyes sin corona

y alegrías amordazadas,

mancilladas a deshora.

Trago y trago,

y si me atraganto,

vomito palabras ardientes

para sanar mi mente

y así seguir tragando

hieles con simiente.

Esa será mi suerte.

Checha, 17 de octubre de 2018